Cultivar tomates puede ser una de las actividades más gratificantes para quienes tienen un huerto casero o una pequeña plantación urbana. Sin embargo, lo que muchos no anticipan es que el éxito del cultivo no depende solo del riego, el sol o la variedad elegida… el sistema de entutorado es un factor clave que puede marcar la diferencia entre una cosecha saludable y una planta caída, rota o infestada.
Hoy vamos a desglosar todo lo que necesitas saber sobre los tutores para tomates: desde qué son, hasta cuál elegir, cómo colocarlos correctamente y los errores más comunes que debes evitar.
¿Qué son los tutores para tomates y por qué son fundamentales en tu huerto?
Los tutores para tomates son estructuras de soporte vertical diseñadas para ayudar a las plantas de tomate a crecer de manera erguida. Aunque a primera vista pueden parecer opcionales, lo cierto es que son imprescindibles si buscas una cosecha saludable, limpia y productiva.
¿Por qué? Porque el tomate es una planta de crecimiento rápido y tallo frágil. Sin un buen sistema de soporte:
- Los frutos pesan y tiran del tallo, provocando roturas.
- La planta queda en contacto con el suelo, favoreciendo enfermedades por hongos y plagas.
- El crecimiento es desordenado y complica la recolección.
- El espacio se desaprovecha en el huerto o maceta.
Un buen tutor no solo previene estos problemas, sino que además optimiza la exposición al sol, mejora la circulación del aire y facilita las tareas de mantenimiento y poda. Es decir, contribuye directamente a que tus tomates estén más sanos, sean más grandes… ¡y sepan mejor!
Ya sea que cultives en maceta, bancal o suelo directo, el uso de tutores es una decisión clave para convertirte en un jardinero exitoso.
Tipos de tutores para tomates: ventajas y desventajas de cada uno
Existen varios tipos de tutores para tomates, cada uno con sus pros y contras. A continuación, analizamos los más populares para que puedas elegir el ideal según tu espacio, presupuesto y estilo de cultivo:
1. Tutores de bambú
Ventajas:
- Naturales, sostenibles y económicos.
- Fáciles de clavar en la tierra.
- Ligeros pero resistentes en cultivos de ciclo corto.
Desventajas:
- Se deterioran con el tiempo y la humedad.
- No son reutilizables a largo plazo.
- No soportan tomateras muy pesadas o indeterminadas.
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- Bambú natural de 105cm y 90cm
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- Respetuoso con el medio ambiente.
2. Tutores espirales metálicos
Ventajas:
- No requieren ataduras: la planta se enrolla sola.
- Muy resistentes y duraderos.
- Permiten un crecimiento ordenado.
Desventajas:
- Precio más alto que otros tipos.
- No son prácticos para tomateras arbustivas.
- Utilizado para el cultivo de plantas de vid y tomates y plantas trepadoras.
- El espiral permite un mejor apoyo de la planta.
- Acero plastificado, alta resistencia.
- 10 unidades: tutores de tomate en espiral en práctico set de 10. Longitud: 90 cm. Diámetro: 5 mm
- Útiles: varillas en espiral como ayuda para trepar pepinos y otras trepadoras. Para jardín y balcón
- Ingeniosas: la forma en espiral de los palos de plantas favorece su crecimiento natural sin atarlas
- 20 unidades: pack de 20 espirales para tomates de 120 cm de largo aprox. y 1 cm de diámetro aprox.
- Útiles: tutores para tomates y otras plantas trepadoras. Puedes usarlos en el jardín o en el balcón
- Prácticas: gracias a la forma en espiral de las guías para plantas no necesitas amarrarlas al tutor
3. Varillas de plástico o fibra de vidrio
Ventajas:
- Ligeras, resistentes a la intemperie.
- Reutilizables.
- No se astillan ni se pudren.
Desventajas:
- Pueden doblarse con plantas pesadas.
- No aportan estética natural al huerto.
- Para trepadoras: soportes para plantas para sostener y darles forma. Perfectos para usar en macetas
- Set: 5 tutores para plantas de maceta para usar en interiores, balcones y terrazas o en el jardín
- Estabilidad: tutores de tomates con robustas varillas metálicas y 3 anillas ajustables de 3 tamaños
- Paquete de 10 Unidades. Medida: Ø 8 – 10 mm. x 60 cm.
- Realizado en bambú, recubierto de plastico resistente.
- Al estar plastificado aguantan mas a la intemperie que los tutores de madera sin plastificar.
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4. Mallas verticales o rejillas
Ventajas:
- Perfectas para cultivos intensivos o de pared.
- Distribuyen el peso de la planta de forma uniforme.
- Permiten entutorado compartido entre varias plantas.
Desventajas:
- Requieren instalación más compleja.
- Menos prácticas si solo cultivas 1-2 plantas.
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Cada opción tiene su lugar. Si estás empezando, lo ideal es comenzar con tutores de bambú o espirales metálicos, fáciles de instalar y manejar. En cultivos más grandes o permanentes, las mallas y varillas reutilizables ofrecen mayor control.
¿Cuándo y cómo colocar los tutores para tomates?
El momento ideal para colocar el tutor es justo después del trasplante de la planta joven, cuando aún mide entre 15 y 30 cm. Esto evita dañar las raíces y permite guiar el crecimiento desde el inicio.
Pasos clave para colocar el tutor correctamente:
- Clava el tutor al lado del tallo principal, a unos 3-5 cm de distancia.
- Asegúrate de que penetre lo suficiente en el suelo para que no se mueva.
- A medida que la planta crece, sujétala suavemente con cintas, hilo o clips especiales, sin apretar demasiado.
- Evita hacer nudos apretados, que pueden estrangular el tallo.
- Guía la planta hacia arriba periódicamente, sobre todo si usas tutor espiral o malla.
👉 Consejo: Marca en el calendario una revisión semanal para revisar sujeciones y ajustar el tutorado. Así te aseguras de que la planta sigue creciendo bien alineada.
Un buen tutorado desde el principio ahorra muchos problemas después, sobre todo en las semanas en que los frutos empiezan a pesar.
Errores comunes al usar tutores para tomates (y cómo evitarlos)
Aun con las mejores intenciones, es fácil cometer errores al entutorar tomates. Aquí te dejamos una lista de los fallos más comunes para que los evites:
1. Colocar el tutor demasiado tarde
Una planta ya crecida tiene raíces expandidas. Clavar el tutor en este momento puede dañarlas. Además, al haber crecido desordenadamente, será difícil redirigirla.
2. Usar materiales abrasivos
Muchos usan cuerdas o hilos finos que cortan el tallo al tensarse. Usa cintas suaves, tiras de tela vieja o cintas de plástico específicas.
3. Fijaciones demasiado fuertes o escasas
Demasiado fuerte, y ahogas la planta. Muy pocas sujeciones, y la planta se dobla. La clave está en revisar con frecuencia y añadir fijaciones cada 20-30 cm de altura.
4. Tutores inestables
Un tutor mal clavado no soportará una planta con frutos. Asegúrate de que quede firme y profundo. Si el suelo es muy blando, refuérzalo con más de un punto de apoyo.
5. Descuidar la poda
El tutorado va de la mano con una buena poda. Una planta con demasiados brotes será más difícil de mantener erguida, y más propensa a romperse.
¿Cuál es el mejor tutor para tomates? Guía según el tipo de cultivo
No hay un único “mejor tutor”. Todo depende del entorno donde cultives tus tomates. Aquí te dejo una guía rápida según el caso:
🌱 En macetas o huertos urbanos
- Espirales metálicos o varillas plásticas.
- Necesitan poco espacio y son reutilizables.
🌿 En suelo directo
- Bambú para cultivos de temporada.
- Mallas verticales o estructuras de madera si tienes varias plantas.
🏠 En invernaderos
- Sistemas de cuerda suspendida.
- Mallas horizontales o guías superiores con clips.
👉 Consejo experto: Si cultivas tomates de variedad indeterminada (que crecen constantemente), necesitas tutores altos, firmes y con guía constante. Para variedades determinadas (tipo arbusto), bastará con un tutor más bajo y mínimo mantenimiento.
¿Dónde comprar buenos tutores para tomates? Análisis de tiendas y opciones
Cuando buscas tutores para tomates, es fácil caer en la trampa de comprar el más barato o el primero que aparece online. Pero no todos los tutores son iguales, y elegir mal puede salir caro en salud de tu planta y tiempo invertido.
Aquí te muestro un análisis rápido de las principales opciones disponibles en España:
🔹 Amazon
- Variedad: Enorme. Desde bambú hasta espirales metálicos o kits de entutorado.
- Ventajas: Comparación rápida entre modelos y precios. Opiniones de otros usuarios.
- Desventajas: No siempre la mejor calidad; hay que saber filtrar entre marcas.
🔹 Mallas y Plásticos
- Especializados: Se centran en tutores agrícolas profesionales.
- Calidad: Muy buena. Ideal para huertos medianos y grandes.
- Desventajas: Menos enfoque al jardinero doméstico. Envíos pueden tardar más.
🔹 Leroy Merlin
- Accesible: Presencia física en muchas ciudades.
- Variedad: Moderada. Bambú, espirales y varillas plásticas.
- Precio: Competitivo. Buena opción si prefieres ver el producto antes de comprar.
Otras opciones a considerar:
- Viveros locales: Ideal para encontrar tutores hechos con caña local o materiales ecológicos.
- Ferreterías de barrio: Sorprendentemente útiles, especialmente para clips y accesorios de entutorado.
💡 Consejo práctico: Compra siempre un poco más de lo necesario. Los tutores extra pueden servir para otras plantas o como refuerzo si una tomatera crece más de lo esperado.
Consejos prácticos de jardineros expertos sobre el tutorado
Aunque tú no tengas experiencia personal (¡aún!), recopilamos los mejores consejos de jardineros experimentados que comparten su sabiduría en foros, blogs y grupos de cultivo urbano:
🔸 “Nunca pongas el tutor cuando la planta ya está cargada de tomates. Siempre hazlo antes de que florezca.”
🔸 “El bambú es genial, pero si lo reutilizas al año siguiente, desinféctalo. Puede tener hongos invisibles.”
🔸 “Prefiero los espirales metálicos. No hay que estar atando cada semana, y se limpian fácilmente para la próxima temporada.”
🔸 “En invernadero, el sistema de cuerda colgante es insuperable. Barato, reutilizable y permite guiar la planta con precisión.”
🔸 “Lo barato sale caro. Una vez se me doblaron unos tutores plásticos baratos y la planta se vino abajo entera.”
Escuchar la voz de la experiencia nos permite evitar errores y adoptar métodos probados desde el inicio. Así tu cultivo tiene un mejor arranque y mayor probabilidad de éxito.
¿Se pueden hacer tutores caseros para tomates? Hazlo tú mismo
¡Sí! Y es una excelente opción si tienes creatividad y algunos materiales por casa. Aquí algunas ideas efectivas:
1. Tutores con palos de escoba o madera reciclada
- Si tienes restos de bricolaje o palos viejos, líjalos y reutilízalos como tutores.
2. Estructuras en forma de tipi
- Usa tres cañas largas unidas por arriba como tipi y planta una tomatera en cada base.
3. Mallas de obra o restos de valla metálica
- Fáciles de instalar contra una pared o en forma de tubo circular.
4. Cuerda y ganchos desde techo o pérgola
- Perfectos para balcones o invernaderos. Solo necesitas un punto superior de anclaje.
Consejos extra:
- Usa siempre materiales limpios.
- Asegúrate de que no tengan puntas ni astillas.
- Revisa que el tutor casero sea firme y no se oxide (si es metal).
El bricolaje te permite ahorrar y personalizar tu huerto a tu estilo. ¡Y además es muy satisfactorio!
Conclusión: cómo elegir el tutor ideal para tus tomates paso a paso
Elegir el tutor adecuado para tus tomates no es complicado… si sabes qué buscar. Aquí tienes un resumen en 5 pasos:
- Identifica el tipo de planta (determinada o indeterminada).
- Elige el tutor que mejor se adapte al espacio disponible: bambú para suelo, espiral para macetas, cuerda para invernadero.
- Instálalo desde el inicio, al trasplantar.
- Fija la planta con suavidad y constancia durante su crecimiento.
- Revisa cada semana el estado del tutor y los puntos de sujeción.
Un buen sistema de entutorado no solo te evita problemas, sino que mejora la salud, el rendimiento y la estética del cultivo. Además, te permite disfrutar de la jardinería con más orden y mejores resultados.
Ahora que conoces todo lo necesario, estás listo para empezar tu cultivo de tomates con confianza. Y si aún no has plantado los tuyos… ¡es el momento perfecto para hacerlo!
